Una de las partes fundamentales de tu vehículo son los neumáticos y de su estado depende que tu experiencia de conducción sea más o menos segura. Por esta razón, desde Salfa Neumáticos y Baterías, te contamos cómo la presión de tus neumáticos puede afectar tanto la seguridad como el rendimiento de tu vehículo y por qué es un factor tan importante.
Importancia de la presión óptima de los neumáticos
Teniendo en cuenta que los neumáticos son el único elemento de tu vehículo en contacto directo con el asfalto, es fundamental que la presión sea la correcta, para que las bandas de rodadura funcionen como deben (es decir, que se desgasten de forma regular y conserven su adherencia).
Cuando la presión de tus neumáticos es la adecuada, su desempeño será óptimo: tendrán mayor estabilidad en las curvas, máximo confort al conducir, más seguridad, etcétera.
Si la presión es mayor a la recomendada, se puede producir un desgaste irregular en la banda de rodadura que reducirá su vida útil y te obligará a reemplazar el neumático antes de lo que esperabas. Asimismo, esta falla puede comprometer los niveles de seguridad de tu vehículo cuando conduces, ya que el contacto de estos con el asfalto es insuficiente.
Por el contrario, si la presión no es la suficiente, el neumático se deforma en la zona central provocando un calentamiento excesivo, riesgos de daño en su estructura, reventones, mayor consumo de combustible y hasta fallas en el sistema de frenos (al aumentar la distancia de frenado).
¿Cuál es la presión recomendada para mis neumáticos?
Varía de acuerdo al tipo de vehículo que tengas, el modelo, la versión, el uso que le des y las posibles modificaciones que le hayas realizado. No obstante, es crucial que tengas presente los datos ofrecidos por el fabricante, ubicados, generalmente, en el interior de la puerta del conductor.
En este sticker informativo se especifica la presión recomendada para cada medida de neumático, según la velocidad o el volumen/peso de carga que lleves. Podrás encontrarla expresada en PSI (en español, libra de fuerza por pulgada cuadrada) o en bares, en la lectura que te arroje el manómetro (el instrumento utilizado para medir la presión).
Por ejemplo, un automóvil convencional suele requerir una presión alrededor de 30 PSI o bares.
Cambia tus neumáticos dañados haciendo clic aquí.
¿Con qué frecuencia se debe revisar la presión de los neumáticos?
La verdad es que tan seguido como sea posible. Generalmente, la recomendación es hacerlo una vez cada 15 días o al mes, porque los neumáticos van perdiendo poco a poco la presión de aire. Especialmente, durante el verano, cuando, con el aumento de las temperaturas, esta puede llegar a bajar en mayor cantidad, o cada vez que vayas a realizar un viaje.
Para poder medir la presión del neumático es muy importante que lo hagas cuando esté frío, si no, no obtendrás las cifras reales de la presión.
Todo esto no solo te garantizará que el desempeño de tu vehículo sea el adecuado, sino que les dará a ti y a tu familia la tranquilidad/seguridad que necesitan.
Ventajas de mantener tus neumáticos con la presión correcta
Conducción agradable
El que los neumáticos tengan la presión correcta hace que la conducción de tu vehículo sea más estable. Notarás esto rápidamente, ya que te resultará mucho más fácil manejarlo. Así, evitarás perder el control y podrás prevenir situaciones imprevistas, potencialmente peligrosas, mientras conduces.
De igual forma, cuando los niveles de presión son adecuados, potencian el rendimiento de tus neumáticos en condiciones meteorológicas adversas, como la lluvia, por ejemplo, con la que aumentan las posibilidades de aquaplaning.
Mayor precisión en la dirección
Un neumático con buena presión, facilitará el que tu vehículo varíe su trayectoria con mayor precisión y rapidez. Esto hará que tu conducción sea más fluida, tengas más confort al maniobrar y que tu auto reaccione más eficazmente frente a cualquier imprevisto.
De esta manera, podrás, por ejemplo, tomar una curva muy cerrada o una calle estrecha con tranquilidad.
Garantiza la distancia de frenado
Es decir, el trayecto que el automóvil recorre desde que pusiste en marcha tu auto hasta que lo detienes. Si te encuentras en una situación inesperada, tratando de evitar un posible accidente, por ejemplo, es vital que esa distancia sea mínima, pero si la presión de tus neumáticos es defectuosa, esta puede aumentar hasta un 40 %.
En este sentido, el que la presión de tus neumáticos esté en sus niveles correctos garantizará el buen funcionamiento de tu sistema de frenos y, por ende, te brindará mayor seguridad al manejar.
Tu seguridad es nuestra prioridad
En Salfa Neumáticos y Baterías, nuestro objetivo es entregarte soluciones eficaces para tu automóvil, que te garanticen la tranquilidad que tanto estás buscando. Por ello, ponemos a tu disposición una amplia selección de neumáticos de calidad superior, que les brindarán a ti y a tu familia la seguridad que necesitan en la vía.
Ingresa en nuestra web para conocer todos los modelos que tenemos para ofrecerte o comunícate con nuestro Contact Center al número 600 360 6200 (lunes a viernes, de 8:30 a 13:15 y de 14:15 a 18:30).
Importancia de la presión óptima de los neumáticos
Teniendo en cuenta que los neumáticos son el único elemento de tu vehículo en contacto directo con el asfalto, es fundamental que la presión sea la correcta, para que las bandas de rodadura funcionen como deben (es decir, que se desgasten de forma regular y conserven su adherencia).
Cuando la presión de tus neumáticos es la adecuada, su desempeño será óptimo: tendrán mayor estabilidad en las curvas, máximo confort al conducir, más seguridad, etcétera.
Si la presión es mayor a la recomendada, se puede producir un desgaste irregular en la banda de rodadura que reducirá su vida útil y te obligará a reemplazar el neumático antes de lo que esperabas. Asimismo, esta falla puede comprometer los niveles de seguridad de tu vehículo cuando conduces, ya que el contacto de estos con el asfalto es insuficiente.
Por el contrario, si la presión no es la suficiente, el neumático se deforma en la zona central provocando un calentamiento excesivo, riesgos de daño en su estructura, reventones, mayor consumo de combustible y hasta fallas en el sistema de frenos (al aumentar la distancia de frenado).
¿Cuál es la presión recomendada para mis neumáticos?
Varía de acuerdo al tipo de vehículo que tengas, el modelo, la versión, el uso que le des y las posibles modificaciones que le hayas realizado. No obstante, es crucial que tengas presente los datos ofrecidos por el fabricante, ubicados, generalmente, en el interior de la puerta del conductor.
En este sticker informativo se especifica la presión recomendada para cada medida de neumático, según la velocidad o el volumen/peso de carga que lleves. Podrás encontrarla expresada en PSI (en español, libra de fuerza por pulgada cuadrada) o en bares, en la lectura que te arroje el manómetro (el instrumento utilizado para medir la presión).
Por ejemplo, un automóvil convencional suele requerir una presión alrededor de 30 PSI o bares.
Cambia tus neumáticos dañados haciendo clic aquí.
¿Con qué frecuencia se debe revisar la presión de los neumáticos?
La verdad es que tan seguido como sea posible. Generalmente, la recomendación es hacerlo una vez cada 15 días o al mes, porque los neumáticos van perdiendo poco a poco la presión de aire. Especialmente, durante el verano, cuando, con el aumento de las temperaturas, esta puede llegar a bajar en mayor cantidad, o cada vez que vayas a realizar un viaje.
Para poder medir la presión del neumático es muy importante que lo hagas cuando esté frío, si no, no obtendrás las cifras reales de la presión.
Todo esto no solo te garantizará que el desempeño de tu vehículo sea el adecuado, sino que les dará a ti y a tu familia la tranquilidad/seguridad que necesitan.
Ventajas de mantener tus neumáticos con la presión correcta
Conducción agradable
El que los neumáticos tengan la presión correcta hace que la conducción de tu vehículo sea más estable. Notarás esto rápidamente, ya que te resultará mucho más fácil manejarlo. Así, evitarás perder el control y podrás prevenir situaciones imprevistas, potencialmente peligrosas, mientras conduces.
De igual forma, cuando los niveles de presión son adecuados, potencian el rendimiento de tus neumáticos en condiciones meteorológicas adversas, como la lluvia, por ejemplo, con la que aumentan las posibilidades de aquaplaning.
Mayor precisión en la dirección
Un neumático con buena presión, facilitará el que tu vehículo varíe su trayectoria con mayor precisión y rapidez. Esto hará que tu conducción sea más fluida, tengas más confort al maniobrar y que tu auto reaccione más eficazmente frente a cualquier imprevisto.
De esta manera, podrás, por ejemplo, tomar una curva muy cerrada o una calle estrecha con tranquilidad.
Garantiza la distancia de frenado
Es decir, el trayecto que el automóvil recorre desde que pusiste en marcha tu auto hasta que lo detienes. Si te encuentras en una situación inesperada, tratando de evitar un posible accidente, por ejemplo, es vital que esa distancia sea mínima, pero si la presión de tus neumáticos es defectuosa, esta puede aumentar hasta un 40 %.
En este sentido, el que la presión de tus neumáticos esté en sus niveles correctos garantizará el buen funcionamiento de tu sistema de frenos y, por ende, te brindará mayor seguridad al manejar.
Tu seguridad es nuestra prioridad
En Salfa Neumáticos y Baterías, nuestro objetivo es entregarte soluciones eficaces para tu automóvil, que te garanticen la tranquilidad que tanto estás buscando. Por ello, ponemos a tu disposición una amplia selección de neumáticos de calidad superior, que les brindarán a ti y a tu familia la seguridad que necesitan en la vía.
Ingresa en nuestra web para conocer todos los modelos que tenemos para ofrecerte o comunícate con nuestro Contact Center al número 600 360 6200 (lunes a viernes, de 8:30 a 13:15 y de 14:15 a 18:30).